El vestuario de Maléfica

16/10/2019

Ellen Mirojnick (El gran showmanBehind the Candelabra) fue la encargada del diseño de vestuario para Maléfica: Dueña del Mal. Además de la enorme cantidad de atuendos creados para Maléfica, Aurora y la Reina Ingrith, su departamento también estuvo a cargo de vestir a los casi 600 extras que hacían de pueblerinos. “Mi rol es dar vida a los personajes visualmente. Cuando leo un guion, mi primera impresión es visualizar imágenes. Trabajando junto con el director, los actores y todos los diferentes artistas involucrados en la filmación, concebimos un tema sobre la visión completa de la película. Comienzo a aplicar esa visión a los diseños de vestuario, para mostrar cómo se sienten los personajes, cómo se mueven a través de la historia y cómo cambian”.

El vestuario de Aurora es etéreo, con algo de sofisticación, ideal para alguien que reina en el mundo de criaturas místicas. Su apariencia es la de un cuento de hadas más moderno, con una paleta de colores impresionistas donde predominan los azules y rosados pálidos.

Como el personaje más fuerte de la película, Maléfica debe destacarse del resto de los personajes. La apariencia glamorosamente malvada incluye pómulos tallados, la piel pálida, las cejas perfectamente arqueadas y los labios rojos. Para llevar a cabo esa transformación eran necesarias tres horas al día en la silla de maquillaje para Jolie.

En esta película Maléfica tiene alas todo el tiempo, así que sus trajes están hechos con telas fluidas y vaporosas que se ven preciosas cuando se mueven con el viento”, comenta Mirojnick.

La apariencia de la Reina Ingrith contrasta completamente por su seriedad. Su apariencia es majestuosa y a la vez moderna, y sugiere un aire de riqueza y privilegio. Tiene ocho vestidos diferentes, todos parecidos en cuanto a su forma, pero de diferentes telas y con diferentes accesorios.

La apariencia de las Hadas Oscuras, esas criaturas aladas con cuernos como los de Maléfica, es más primitiva, ya que se adaptaron y evolucionaron de diferentes formas según la geografía de sus biomas (selva, tundra, bosque y desierto). Construyen nidos, como si fueran parte aves y parte humanos, pero no fabrican herramientas ni armas, y encuentran todo lo que necesitan en la naturaleza. Esto inspiró un enfoque singular en términos de utilería, escenografía y vestuario.

Su estreno en México es este fin de semana.